Los titulares de las residencias para Adultos Mayores existentes en Gálvez se acercaron en la mañana del lunes al Palacio Municipal de esta ciudad para entregarles un escrito ya que están preocupados por la situación que nos encontramos atravesando.
El escrito:
Ing. Mario Fissore
Intendente Municipal
MUNICIPALIDAD DE GÁLVEZ
Quienes suscriben, OLIVA CAMILA, MONTENEGRO JOAQUIN, MUÑOZ MARIA DEL CARMEN, ORELLANA SOLEDAD, GABARELLA DANTE, MONTENEGRO BELEN, ALLEGRI MIRIAN, CABRERA MARIA LAURA, PINES ALIDA, BOCCO MARINA, MANSILLA ELSA, TORRES VICTORIA y SIBOLDI GRACIELA, en nuestro carácter de titulares de las residencias para Adultos Mayores existentes en la Ciudad de Gálvez, Provincia de Santa Fe,con el patrocinio del Dr. Quaranta Javier Adrián, constituyendo domicilio legal a los efectos del presente en calle Dorrego 658 de la Ciudad de Gálvez, a Uds. nos presentamos y respetuosamente decimos:
Que por medio del presente queremos manifestar nuestra inmensa preocupación por la situación que nos encontramos atravesando todos los geriátricos que funcionamos en esta ciudad, a raíz de las notificaciones por parte del Ministerio de Salud de la Provincia de Santa Fe que hemos recibido días pasados, exigiendo explicaciones sobre la posesión o no de una supuesta habilitación provincial para funcionar que exige dicho ministerio.
A razón de ello es que ponemos en vuestro conocimiento que todos los dueños de los hogares de ancianos que suscribimos la presente nos encontramos padeciendo gran intranquilidad e inquietud respecto a las medidas que pueda llegar a adoptar el Estado Provincial respecto a los establecimientos que administramos.
Como es de público conocimiento, todos los hogares que suscribimos la presente contamos con la debida autorización municipal para funcionar, en cumplimiento de todos y cada uno de los requisitos exigidos por la ordenanza municipal Nº 4174/2015. Dicha ordenanza en sus arts. 1 y 2, define y clasifica nuestros establecimientos destinados al alojamiento de ancianos dependientes y semi dependientes que requieren una asistencia especial debido a incapacidades motrices, sensoriales u otras, o a enfermedades propias de su condición, o a ancianos cuya dependencia no exceda la necesidad de acompañamiento, ayuda en su higiene personal, alimentación y vigilancia médica periódica acorde a una asistencia no sanatorial. Asimismo, exige el cumplimiento de características edilicias e infraestructura, contar con determinados elementos, con determinado personal y a llevar cierta documentación, requisitos que se encuentran debidamente cumplimentados por todos nosotros, dado que todos contamos con la habilitación otorgada por parte de este municipio, que fueron renovada periódicamente y se encuentran vigentes.
Que para acceder a dicha habilitación Municipal hemos realizado innumerables inversiones edilicias, de capacitación y recursos humanos y hemos sido sometidos a regulares inspecciones tendientes a verificar el acabado cumplimiento de las exigencias de la normativa Municipal mencionada.-
Que la reglamentación de la ley provincial 9847 para habilitar los establecimientos geriátricos, excede absolutamente los requerimientos de la ordenanza municipal, generándonos un grave perjuicio al vernos imposibilitados, en la mayoría de los casos, de adaptar nuestros establecimientos para adecuarnos a dicha normativa, puesto que no contamos con las estructuras edilicias de semejante magnitud.
Que desde hace largos años trabajamos en óptimas condiciones, esforzándonos en brindar el mayor cuidado y asistencia a las personas ancianas que alojamos en nuestros establecimientos.- De resultar aplicable la reglamentación provincial, deberíamos dejar sin hospedaje a las personas que padecen alguna minusvalía física y/o psíquica. Dichas personas dependientes o semi dependientes que se alojan en nuestros hogares, ocupan aproximadamente 65% de la capacidad total de los geriátricos, restando por tanto un 35% aproximado de ancianos auto válidos alojados.
Ello realmente nos alerta y moviliza, puesto que tenemos a nuestro cargo el cuidado de muchos adultos mayores que padecen alguna minusvalía y que como ut supra expresamos, de resultar aplicable la normativa provincial, dichos ancianos quedarían literalmente desprotegidos y/o abandonados, puesto que algunos podrán volver con sus familias, pero muchos otros no tienen siquiera donde vivir y/o familiares que puedan hacerse cargo en debida forma de su cuidado.
La mayor preocupación que nos inunda es que, ante la negativa de habilitación provincial y de adoptarse medidas que sancionen y/o restrinjan nuestra actividad, luego de tantos años de trabajo, dedicación y cuidado personal de los ancianos alojados en nuestros establecimientos, debamos reducir la capacidad de alojamiento sólo a ancianos auto válidos y dejar desamparados a los minusválidos, con las consecuencias sociales que ello acarrea.
Todos asumimos una gran responsabilidad al recibir en nuestros hogares a adultos mayores, ya sean estos auto válidos o dependientes o semi dependientes que requieren mayor asistencia para la realización de sus actividades diarias esenciales, como alimentación, vestimenta, higiene, entre otras. Ejercemos el cuidado personal de todos y cada uno de ellos con la debida diligencia que merece esta actividad, y otorgamos tranquilidad a sus familiares de que las personas alojadas en nuestros establecimientos estarán debidamente cuidadas.
Reiteramos, de resultar aplicable a nuestros establecimientos la normativa provincial como se pretende, ¿qué medidas tomará este Municipio para garantizar el cuidado de casi 200 adultos mayores que quedarán literalmente en la calle? ¿Se ha pensado o previsto las consecuencias sociales y destrato humano que semejante arbitraria decisión ocasionaría? Claro esta que la crisis social que el cierre de nuestros establecimientos generaría, no es ajena a este Municipio ni puede el mismo hacer “la vista gorda”.
Sumado a ello, los establecimientos que administramos desde hace años son nuestra fuente de trabajo y la de muchas familias, y que de vernos obligados a reducir la capacidad de hospedaje sólo a personas auto válidas y/o cerrar nuestros hogares para adultos mayores, nos generaría enormes perjuicios económicos, generando cuantiosas pérdidas de fuentes de trabajo con el consecuente agravamiento de la crisis económica que se encuentra atravesando la sociedad.
Es por todo ello que entendemos imprescindible se tengan en consideración nuestras incertidumbres y se analicen todas las consecuencias económicas y sociales que acarrearía cualquier medida adoptada por la provincia que perjudique el ejercicio de nuestra actividad.
Por lo expuesto, solicitamos se coordine una reunión entre los involucrados (Poder Ejecutivo Municipal, Consejo Municipal y representantes de los establecimientos geriátricos habilitados en este Municipio) a los fines de buscar una solución pacífica al problema planteado que garantice el alojamiento y cuidado merecido por todos los adultos mayores de nuestra ciudad, así como también el mantenimiento de las fuentes de trabajo.
En el día de la fecha es presentado escrito del mismo tenor ante el Honorable Concejo Municipal de Gálvez a tales efectos.
Sin otro particular, ya la espera de una respuesta favorable aprovechamos la oportunidad para saludarlo atentamente.
